Es domingo. He tratado de pasar el día sin tener que decidir que hacer con mi vida. Se supone que esta semana es la final, para saber si quiero vivir en Lima, o si quiero morir en otra parte. Prefiero no pensar hasta el último minuto, eso siempre da resultados.
Ha llegado a tanta mi ansiedad, que he estado alejada de computadores u otros objetos que me estimulen a describir mi estado y a volver a la introspección diaria de ¿Qué quiero hacer realmente con mi vida? Así que me he decidido a ayudar en casa. Hace años que no lavaba ropa. Recién hoy día me di cuenta. Hace varios años que solo vengo a la casa, dejo mi bolsa de ropa sucia en el patio y dejo que alguien más la ponga en la lavadora. No importa si es ropa blanca o de color, si está tremendamente sucia o solo con olor a cigarro o perfume pasado. No. La dejo toda junta y alguien se encarga de hacerlo.
Pero hace algunas semanas, mi familia se ha declarado en huelga. Al darse cuenta que no sé manipular la lavadora, que no tengo idea de cómo programarla o que ciclo elegir para determinada ropa. Es un asco, con la tecnología digital a veces me siento una ignorante en cualquier campo. Así que hoy voy al patio y decido lavar la ropa, separo cada prenda y decido lavar a mano todas las ropas pequeñas. De pronto me doy cuenta que hace como 10 años que no lavo a mano, ni utilizo jabón y menos, uso cloro. Soy una inútil total, creyendo que puede vivir sola. Ja! Sola pero cerca de papito y mamita para que le solucionen los problemas. Soy un fiasco, pienso. Jamás viviré con alguien, solo para evitarle la tortura de tener que mantener a un parásito como yo. Pienso tantas cosas negativas, que solo falta que me flagele con la ropa mojada y diga Por mi culpa, por mi culpa!
Luego voy a la cocina. Quiero ayudar, digo. Pero no hay nada que hacer. ¿Puedo pelar las papas? Claro, dice mi madre, algo sorprendida. La verdad es que siento que necesito contacto humano, que quiero estar con gente alrededor todo el tiempo, que no quiero quedarme sola como ahora, para evitar pensar. La comida huele bien, hoy no he hecho ejercicios, ni me he bañado, sigo con el pijama y los cabellos de bruja. Si alguien me viera en este momento, pienso, vería a la mujer mas fea de la tierra, con un aspecto deplorable de ropa ancha, cabello volando, unos gruesos anteojos y la cara sin arreglar.
No quiero casarme, pienso. Si me caso, alguien un día me verá así y pensará que incluso Alf puede ser mas atractivo que yo, me querrá por compasión, se quedará conmigo solo por alguna gratitud injustificada. No querrá tener sexo, me preguntará ¿Dónde está la mujer de la que me enamoré? Y yo seré tan honesta que no sabré que contestar. Probablemente si sigo sin trabajar, simplemente me vuelva ama de casa y me suicide.
Ha llegado a tanta mi ansiedad, que he estado alejada de computadores u otros objetos que me estimulen a describir mi estado y a volver a la introspección diaria de ¿Qué quiero hacer realmente con mi vida? Así que me he decidido a ayudar en casa. Hace años que no lavaba ropa. Recién hoy día me di cuenta. Hace varios años que solo vengo a la casa, dejo mi bolsa de ropa sucia en el patio y dejo que alguien más la ponga en la lavadora. No importa si es ropa blanca o de color, si está tremendamente sucia o solo con olor a cigarro o perfume pasado. No. La dejo toda junta y alguien se encarga de hacerlo.
Pero hace algunas semanas, mi familia se ha declarado en huelga. Al darse cuenta que no sé manipular la lavadora, que no tengo idea de cómo programarla o que ciclo elegir para determinada ropa. Es un asco, con la tecnología digital a veces me siento una ignorante en cualquier campo. Así que hoy voy al patio y decido lavar la ropa, separo cada prenda y decido lavar a mano todas las ropas pequeñas. De pronto me doy cuenta que hace como 10 años que no lavo a mano, ni utilizo jabón y menos, uso cloro. Soy una inútil total, creyendo que puede vivir sola. Ja! Sola pero cerca de papito y mamita para que le solucionen los problemas. Soy un fiasco, pienso. Jamás viviré con alguien, solo para evitarle la tortura de tener que mantener a un parásito como yo. Pienso tantas cosas negativas, que solo falta que me flagele con la ropa mojada y diga Por mi culpa, por mi culpa!
Luego voy a la cocina. Quiero ayudar, digo. Pero no hay nada que hacer. ¿Puedo pelar las papas? Claro, dice mi madre, algo sorprendida. La verdad es que siento que necesito contacto humano, que quiero estar con gente alrededor todo el tiempo, que no quiero quedarme sola como ahora, para evitar pensar. La comida huele bien, hoy no he hecho ejercicios, ni me he bañado, sigo con el pijama y los cabellos de bruja. Si alguien me viera en este momento, pienso, vería a la mujer mas fea de la tierra, con un aspecto deplorable de ropa ancha, cabello volando, unos gruesos anteojos y la cara sin arreglar.
No quiero casarme, pienso. Si me caso, alguien un día me verá así y pensará que incluso Alf puede ser mas atractivo que yo, me querrá por compasión, se quedará conmigo solo por alguna gratitud injustificada. No querrá tener sexo, me preguntará ¿Dónde está la mujer de la que me enamoré? Y yo seré tan honesta que no sabré que contestar. Probablemente si sigo sin trabajar, simplemente me vuelva ama de casa y me suicide.
Aun no es hora de almorzar, todos aun siguen llenos. Mi padre corta las hojas de la parra en el patio, mi hermana barre, mi sobrino arregla su habitación, mi madre cocina. Nadie dice nada, solo asean la casa en silencio y con rapidez, como si esperáramos a alguien para el almuerzo. Pero yo estoy habladora, comento con mi hermana, acerca de mi carrera, rajo un poco, me permito decir groserías que no sean solo escritas. Me siento rara, alguna vez aprenderé a hablar porquerías sin sentir que hago algo malo. A veces me siento como un Norman Bates, con una personalidad para hacer y decir cosas descabelladas, pero que en la vida cotidiana, duda incluso para matar una mosca. Esa soy yo, pienso. En la vida familiar,
Laura Hammer está oculta como un monstruoso ser capaz de romper todos los límites y decir todas esas cosas que puedan herir a los demás y con frecuencia a si misma.
Llega la hora de ir a la mesa. Pero antes aprovecho para hablar con mi padre, quiere que le revise un tumor que le ha salido en la frente. Mi viejo llama tumores a cualquier cosa que le aparezca en el cuerpo, tiene una fijación con el cáncer, que raya en la hipocondría. Luego me dice que mi hermana y mi madre lo han hecho rabiar tanto en el desayuno que teme que esté dándole un derrame cerebral.
Yo soy una mala médica con mi padre, trato de quitarle toda importancia a sus
males y no le doy posibilidad a que piense demás. A que haga lo que todo
paciente ansioso hace cuando habla de sus problemas: Sentirse importante.
Luego le doy un masaje al cuello. Hacerle masajes a mi viejo es como tratar de doblegar a un toro, todo está tan tensado, que siento que los dedos se me parten. Estoy preocupado por ti, me dice. ¿Por qué? "Porque cuando las personas comienzan a hacer cojudeces están anunciando su muerte". Obviamente con cojudeces, se refiere a todas aquellas cosas anormales que he hecho hoy, como lavar, barrer y ayudar en la cocina. Yo me río, me hace reír. Luego pienso que tal vez me esté muriendo y aún no lo sé. Ese pensamiento me tranquiliza.
La muerte es un lugar tan cómodo para el que no quiere pelear por nada.
Es domingo por la noche, habla la ministra de la mujer por el noticiero y no puedo contener la risa. Es tan tonta.
Sra. Ministra, le preguntan, ¿porqué ha contratado gente sin experiencia para su despacho? Ella trata de negar que es a causa de la Búfalo Card y responde que son gente muy capaz y con muchos títulos y doctorados, incluso del extranjero. Usted ha puesto en la jefatura de tesorería a un joven que recién está terminando la universidad, enfatiza el periodista. “Es que hay que dar oportunidad a los jóvenes”, dice ella, con descaro. Pero ministra, en el CV de sus asesores, aparece que son practicantes solamente, que su título profesional está en trámite. Y ella dice la que de seguro será una frase célebre “Es que no lo pusieron por modestia”. Entonces la cámara hace zoom a su cara de palo. Y yo me muero de risa.
¿Quién dijo que para relajarse una necesitaba ver programas de humor?
Simplemente hay que poner el canal de noticias peruano.
Es domingo, casi media noche. Mañana empieza la primer semana que decide el resto de mi vida. Quisiera detener el tiempo, no tener que decidirme a nada. Tener 11 años y decir que tengo fiebre. Una fiebre que me vuelve incapaz de salir de casa, de dejar de escribir, de asumir mis miedos o buscar mi destino en otra parte.
Es domingo, fuck! Siempre domingo.
14 comentarios:
El protagonista de la última novela de Paul Auster se instalaba en Booklyn con la idea de retirarse de la vida. Pero en realidad se retiraba de la idea que él tenía de la vida y lo que hacía era comenzar a vivir. Como si vivir fuera precisamente aquello sobre lo que no teníamos una idea previa. Descubrir.
Lo que dice tu horoscopo:
Un poco de sacrificio nunca viene mal. Uno siempre se arrepiente cuando deja cosas a medio hacer.
Eso nos pasa a todos... a veces no sabes donde estas, donde vas, o simplemente, que rumbo seguir.
Aunque yo me acuerdo de alguien que hace unos dias, sabiamente, me dijo "Reacciona". Con otras palabras, pero basicamente es eso.
Que hacer con la vida... buena pregunta. Algunos no lo sabemos, Hija del Sol. O no vemos que hacer con ella.
Pero creo que tu eres tan fuerte como para seguir adelante.
Y en cuanto a los pelos de bruja...
Creo que infravaloras tu belleza. O la que se destila de estas letras. Yo de ti, no me preocuparia por eso.
Un saludo de Edem, que te echa de menos.
no insistas en preguntarte que va a pasar si haces algo.
como dicen los de Nike, "just do it"
Si hay un día np-latinoamericano que se parezca a latinoamérica es el domingo...nos retorna a lo que somos, a nuestras ancestrales costumbres, por eso nos deprime, nos recuerda que somos parte de algo no-nuestro. Tu prosa es deliciosa y llena de giros que hacen honor a tu ingenio!!
Es curioso, leer y en la mente poder escuchar lo mismo, simultáneamente, es como recibir de nuevo ese sentimiento algo sobrecogedor que me pareció recibir y bueno, aunque de hablar, no escucharías, igualmente no podía hablar, sólo escuchar, ahora, sólo leer.
La danza del sable...
(puf, puf, y vamos tres) Una parra en el patio, un padre preocupado y una madre sorprendida, todos apuntando hacia un personaje: Laura. No podemos volver atrás, aunque queramos. Pero darle una visita y ver cuanto hemos crecido tampoco esta mal. Si vienes a Lima por favor acepta un café o un chifa (me encanta la comida criolla de los chinos de Lima)
Un hombre bueno dijo: AMA Y HAZ LO QUE QUIERAS... o al menos lo intentamos, oh sí, al menos hagamos eso. Cuidate muchísimo Laura.
El inefable poder del Domingo, hace tanto tiempo que no em embarga ese marasmo hostil.
Saludos
A veces, dejar la ciudad por un nuevo espacio es lo mejor.
naaaa, alf es un pase de vueltas cuando corre de un lado a otro de la sala.
Tomar decisiones a veces nos cuesta mucho, a veces sabemos que es lo que tenemos que hacer pero hay miedo, es posible que ya sepas que hacer, pero no lo quieres aceptar, tómate tu semana con calma.
Te sorprenderías de lo que eres capaz de hacer cuando nadie mas puede hacer las cosas por ti.
Recuerda que vayas donde vayas todo estará bien en la medida que tú quieras que eso pase.
Un abrazo.
Que dura autocritica pero respeto todas tus lineas. No se que podria excribir respecto a un tema tan personal y de tanta trascendencia. AUnque creo una cosa a cavalidad: mas importante que el lugar donde vamos a vivir el resto de nuestros dias, es la familia. La unica que da apoyo y soporte, calma la ansiedad, responde nuestras dudas, somos reflejo de lo que se cuece en nuestras familias, hemos desarrollado algunos de sus errores y mas de sus cualidades. Pero es nuestra, ante todo.
Yo aplaudo tu decision de no querer casarte, porque eres una flaca y nuestra sociedad aun pacata es mas reiterativa en ese aspecto con ustedes, a quienes les ponen demasiadas espectativas para "realizarse", como el matrimonio y los hijos.
Como soltero por eleccion (tenga o no pareja), creo que es muy importante escuchar lo que dice la gente sobre este tema, aun somos minoria pero bueno, nada es perfecto.
Saludos y mucha suerte con todo.
Pepao
¿es engreimiento tu segundo nombre?
si son las semanas siguiente las que decidirán tu vida creo que vas por el camino errado. creo que debe ser algo como la oportunidad de enriquecer tu vida según el resultado de las siguiente semanas, que eso de tener la vida definita a tan temprana edad me parece un desperdicio eh...
cuidate chica frutilla despeinada.
*definida
hoy la "t" me ha estado jugando malas pasadas.
es triste este post.
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